En un estudio de mas de
600 estudiantes universitarios, los investigadores encontraron que cada
grupo compartió características similares (quizás polémicas) según sea su amigo
peludo. Permítirme explicar las
diferencias más significativas entre los amantes de los perros y los
amantes de los gatos que fueron sacados de este estudio!
En la Naturaleza, los felinos
son cazadores solitarios y la caza es exclusivamente de noche, sin embargo los
perros viven en sociedad formando grupos, por lo tanto son sociables y son
diurnos.
"Hay una creencia
cultural en la que se participa extensamente, que la especie de animal
doméstico - perro o gato - con la cual una persona tiene la afinidad más fuerte-
dice algo sobre la personalidad del individuo, y esta investigación sugiere que
hay diferencias significativas en rasgos de la personalidad entre la gente del
perro y la gente del gato.
Los amantes del perro siguen
las reglas, mientras que los amantes del gato "tendían a ser no
conformistas, prefiriendo ser oportuno en lugar de seguir las reglas”. A los
que les gustan los gatos tienen una apreciación general del arte, la emoción,
la aventura, las ideas inusuales, la imaginación, la curiosidad y la variedad
de experiencias.
Los resultados mostraron que
la gente del perro es generalmente un 15 por ciento más extrovertida y un 13
por ciento más agradable, además, la gente del perro era un 11 por ciento más concienzuda
que la gente del gato, tienen tendencia a tener autodisciplina y terminar las tareas,
trabajando para lograrlas.
Los amantes del gato son
inteligentes, en el estudio, la gente del gato parece tener más alta la prueba
de la inteligencia que la gente del perro. Aunque esto no necesariamente
es válido para todas las personas de cada grupo, las puntuaciones de las
pruebas de inteligencia más altas tienden a caer dentro de la categoría de
personas de gato, y son un poco más abiertas de mente que los amantes del perro.
Los amantes del perro aman a la gente, el estilo
de vida de un dueño de perro es un poco más activo, ya que los propietarios
llevan a sus mascotas a los parques donde tienen más oportunidades de
socializar con los demás.
El patrón general que sale
de ambos estudios es que los dueños del perro son más sociales, interactivos y los dueños del gato (que poseen gatos
exclusivamente) son más introvertidos, autónomos y menos sociables.
Tal vez una de las
diferencias más reveladoras entre los dueños de perros y gatos se ilustra en
una sola comparación.
Si se pregunta a las
personas que poseen sólo gatos "Si tuvieras un sitio adecuado y no hubiera
otras personas en tu vida, y alguien te diera un cachorro como regalo, ¿lo
aceptarias?" La respuesta a esto se comparó con la que se recibío
cuando se le pregunto a la gente que posee sólo perros, la misma pregunta sobre
un gatito. Más de dos tercios de los dueños de gatos (68 por ciento)
dijeron que no aceptarían a un perro como mascota, mientras que casi el mismo
número de dueños de perros (70 por ciento) dijeron que iban a admitir al gato
en su casa. Esto sugiere que la mayoría de las personas que poseen sólo un
perro son potencialmente dueños de perros y gatos, mientras que la mayoría de
las personas que poseen sólo un gato son exclusivamente dueños de gatos.
¿Quién hubiera pensado que
la elección de una mascota podría decir tanto sobre su personalidad? En general,
puede convenirse que los rasgos de personalidad pueden determinarse en parte a
través de la afinidad de un individuo con un gato o un perro.
