Entre el 5 y el 10% de la
población humana tiene al menos cierta sensibilidad a los gatos. Cuando las
personas entran en contacto con un gato al que son sensibles, pueden
experimentar una amplia gama de síntomas, desde la irritación e hinchazón de
los ojos, o estornudos, hasta ataques potencialmente mortales de asma.
Estudios recientes indican
que la exposición infantil a los gatos puede realmente reducir el riesgo de
enfermedades alérgicas como el asma. Lo mismo sucede con el amamantamiento de
los lactantes.
Un obstáculo importante para
ayudar a los amantes de los gatos es que las partículas de proteína en cuestión
son tan pequeñas que pueden colgar suspendidas en el aire y por lo tanto son
fácilmente inhaladas. Otro obstáculo es que las partículas son pegajosas y se
adhieren o se asientan en cualquier superficie porosa, incluyendo cortinas,
muebles tapizados y ropa de cama, incluso paredes y techos. Debido a que el
alérgeno de gato es tan pequeño y ligero, permanece en la casa durante largos
períodos y hasta ha sido descubierto en hogares hasta seis meses después de que
el gato haya desaparecido de la casa.
Puede ser difícil admitir
que el gato que amas está causando problemas de salud. Muchas personas optan
por soportar los síntomas en lugar de deshacerse de su mascota. Si está
decidido a vivir con su Minino, puede tomar medidas para minimizar los síntomas
de su alergia.
Siga leyendo para aprender
sobre los signos de las alergias de gato y lo que puede hacer para prevenirlas.
Causas
El trabajo del sistema
inmune es encontrar sustancias extrañas, como virus y bacterias, y deshacerse
de ellas. Normalmente, esta respuesta nos protege de enfermedades peligrosas.
Las personas con alergias a mascotas tienen sistemas inmunes más sensibles.
Pueden reaccionar a proteínas inofensivas en la orina de la mascota, la saliva
o la caspa (células muertas de la piel). Los síntomas que resultan son una
reacción alérgica. Las sustancias que causan reacciones alérgicas son
alérgenos.
Los alérgenos de mascotas se
pueden encontrar en los muebles y otras superficies. Los alérgenos no pierden
su fuerza y se mantienen durante mucho
tiempo. A veces los alérgenos pueden permanecer en niveles altos durante varios
meses y se aferran a las paredes, muebles, ropa y otras superficies.
Los Alergenos de gato y
perro están por todas partes incluso en los hogares y otros lugares que nunca
han alojado mascotas. Esto es porque la gente puede llevar alérgenos de
mascotas en su ropa.
Sintomas
Usted no tiene que ser dueño
de un gato para estar expuesto al alérgeno, porque pueden viajar en la ropa de
la gente. Las alergias de gato pueden no aparecer por varios días si su
sensibilidad o los niveles del alérgeno son bajos.
Los signos comunes de una
alergia al gato suelen empezar poco después de entrar en contacto con la caspa
de los gatos, la saliva o la orina.
Más del 90 por ciento de las
personas de las alergias a los gatos provienen de la saliva y la piel del gato.
Se encuentra en niveles más altos en los gatos machos. El alergeno puede causar
hinchazón y picazón de las membranas alrededor de los ojos y la nariz, por lo
general lleva a la inflamación de los ojos y una nariz congestionada. Algunas
personas pueden desarrollar una erupción en la cara, el cuello o la parte
superior del pecho en respuesta al alergeno.
La fatiga es común en las
alergias no tratadas, al igual que una tos continua debido al goteo postnasal.
Sin embargo, los síntomas como fiebres, escalofríos, náuseas o vómitos deben
considerarse relacionados con una enfermedad y no con alergias.
Si usted es alérgico al gato
y los alérgenos de gato entran en sus pulmones, los alérgenos pueden combinarse
con anticuerpos y causar síntomas. Estos pueden incluir dificultad para
respirar, toser y sibilancias. Las alergias de gato pueden causar un ataque de
asma agudo y pueden ser un desencadenante del asma crónica.
Hasta el 30 por ciento de
las personas con asma puede tener un ataque severo al entrar en contacto con un
gato. Usted debe hablar con su médico acerca de un plan de tratamiento si sus
síntomas se convierten en perjudiciales o incómodos.
Hay dos maneras de probar
cualquier alergia a los gatos: pruebas de la piel y análisis de sangre. Las
pruebas cutáneas generalmente son realizadas por un alergólogo debido a la
posibilidad de reacciones severas durante la prueba.
En aproximadamente 15 a 20
minutos, el sitio del pinchazo de la piel puede ponerse rojo o hinchado.. Una
alergia de gato positiva por lo general causará un golpe rojo, picazón al
alérgeno de gato. Estos efectos desagradables suelen desaparecer 30 minutos
después de la prueba.
Remedios caseros
El lavado nasal es un
remedio casero para los síntomas de las alergias de gato. El agua salada
(solución salina) se usa para enjuagar los conductos nasales, reduciendo la
congestión, el goteo postnasal y los estornudos. Se puede hacer agua salada en
el hogar mediante la combinación de 1/8 cucharadita de sal de mesa en un vaso de
agua destilada.
Los filtros de aire de
partículas de alta eficiencia (HEPA) son una de las mejores defensas contra las
alergias a los gatos. Ellos reducen alérgenos aerotransportados al forzar el
aire a través de un filtro especial que atrapa la caspa de mascotas, así como
el polen, los ácaros del polvo y otros alérgenos.
¿Qué puedo hacer si quiero
mantener mi mascota?
No deje entrar a su mascota
de la habitación. Tenga la puerta del dormitorio cerrada
Los alérgenos animales son
pegajosos, asi es que mantenga las superficies limpias y despejadas en toda la
casa. Los pisos y las paredes desnudos son los mejores.
Si usted debe tener
alfombra, límpiela con vapor de con frecuencia.
Use una máscara de polvo
para aspirar. Las aspiradoras provocan alergenos que se han asentado en la
alfombra y empeoran las alergias
La calefacción y el aire acondicionado
pueden propagar alérgenos a través de la casa. Cubra los respiraderos de los
dormitorios con un material filtrante denso como estopilla.
El lavado de la mascota cada
semana puede reducir alérgenos en el aire.
Haga que alguien cepille la
mascota fuera para quitar la caspa, así como limpiar la caja de arena o jaula.
Hable con su alergista sobre
las opciones de medicina o inmunoterapia.
